Claudia es una mujer de 26 años, tiene un hijo de tres años, es casada y los tres viven en la casa de la madre de Claudia. El trabajo de Claudia es en un centro médico, ella se dedica a cuidar pacientes en casa, su formación es de auxiliar de enfermería desde los 23 años. Claudia presentó un dolor de cabeza persistente durante 3 semanas por lo que a pesar de analgésicos comunes que se auto-medicó decidió consultar a su servicio de salud, allí fue tratada con los mismos analgésicos que se había automedicado; el dolor de cabeza persistió luego de otras tres semanas de tratamiento. Claudia optó por consultar de nuevo a su servicio médico y allí decidieron remitirla a un especialista en neurología, inicialmente el especialista le prescribió tratamientos para lo que se pensaba que era una migraña y los recibió por 4 semanas hasta que Claudia empezó a presentar mareos y vómitos persistentes y su esposo se dio cuenta que a Claudia se le estaba desviando su ojo derecho hacia adentro.
Dos días después de eso Claudia sufrió una convulsión por lo cual fue llevada a un servicio de urgencias , allí le practicaron muchos exámenes y encontraron que había una masa muy grande dentro del cerebro de Claudia. El dolor de cabeza que padecía desde hace casi cuatro meses era consecuencia de un tumor cerebral. Claudia fue sometida a tratamientos de radioterapia, quimioterapia y cirugía, sobrevivió un año y sus últimos 3 meses permaneció en estado vegetativo.
El dolor de cabeza o cefálea es uno de los síntomas más comunes en la población, la mayor parte de ellos obedece a causas tensionales, estrés y migrañas o jaquecas. Estos dolores deben ceder con analgésicos comunes y otras medidas básicas que el médico ordena, si esto no ocurre en los primeros días de tratamiento es necesario hacer estudios especializados que identifiquen el origen del dolor y descarten causas graves. Dolores de cabeza refractarios a los analgésicos, los cuales despiertan en la noche o interrumpen el sueño, que se asocien a náuseas o vómito, trastornos en la visión o cambios en el comportamiento son una señal de alerta para estudiarlos de manera juiciosa.